Buscador

lunes, 2 de mayo de 2011

EN RELACION AL PROGRAMA

Hoy, 1º de Mayo, Día de los Trabajadores, se volvió de repente importante en la reunión el asunto de crear una organización política de nuevo tipo; luego de oír la intervención de los interlocutores, considere callar, pues de lo contrario debía entrar al debate, y eso era imposible de hacer, pues el debate debe ser entre iguales y no era esa la situación (a veces uno debe hacer la labor de Zaratustra). Sin embargo, el asunto de la organización política y la elaboración del programa considero de crucial interés, sobre todo ahora que asistimos a una grotesca exhibición de mediocridad política, donde la chabacanería se ha convertido en ideología y el pandillaje, en la forma de actuar del político. La política en el Perú está pasando por un valle de sombra de decadencia atroz, lo cual hace más que necesario una organización política de nuevo tipo.

Lo que sigue, es un artículo denominado “Mi Aporte Insubstancial (Una interpretación personal)”, escrito por mi persona el martes 11 de junio de 2002, con un fuerte tufillo marxista, pero que permitirá establecer mi parecer al tipo de programa que se debería propugnar…

***************

Mi Aporte Insubstancial (Una interpretación personal)

Cuando una organización política identificada con el socialismo científico se propone la empresa de elaborar un programa, de manera inexplicable lo entiende y lo plantea dentro de la propuesta de Lenin – me refiero al Proyecto de Programa de 1899 – y obvia lo señalado por Marx en 1875.

Muchas organizaciones políticas de izquierda, conformadas por personas de heterogénea interpretación de la ideología del socialismo científico yerran al proponerse, en un principio, elaborar forzadamente un programa distinto al de los principios – recordar el Programa Social-Demócrata de Alemania en 1891 – sustituyéndolo por otro que fija conceptos fundamentales mediante tareas políticas inmediatas, por medio de reivindicaciones cercanas, que demandan de nuestra parte, una labor de agitación y, buscar unirlas, profundizarlas para llegar a convertirlas en nuestra actividad por un tiempo determinado. Tal es como entendía Lenin un programa, más no como lo planteaba Marx.

La elaboración de un Programa no es asunto de deseo alguno sino de insoslayable necesidad. Por ende se vuelve más imperioso que nunca el no renunciar ni un instante al enfoque dialectico del asunto. Los acéfalos podrían sentenciar que no existe diferencia entre Marx y Lenin en cuanto al asunto del Programa. Solo los creyentes en el socialismo científico nos gozamos al conocer mejor nuestro avanzado ideario.

…cuando se redacta un programa de principios…, se colocan ante todo el mundo los jalones por los que se mide el nivel del movimiento del partido.” Karl Marx. 1875.

Marx señalaba el asunto de un Programa de Principios, claro que en el Manifiesto Comunista de 1848, se había establecido los principios. Podría, a simple vista, significar que Marx se dedicara a un mismo tema siempre. Mas eso no es así. En el Manifiesto Comunista, Marx y Engels nos enseñan acerca de la inevitable sustitución del capitalismo por una formación económico-social mejor, pero no debido a capricho alguno sino como consecuencia de leyes del desarrollo social que operan objetivamente; entender esto desde posiciones dialécticas y ahondar en el estudio de la sociedad valiéndonos del materialismo consecuente: tal es lo que nos dice el primer documento programático del socialismo científico. En cambio en las Glosas Marginales al Programa del Partido Obrero Alemán, conocidas como Critica del Programa de Gotha, Marx se propuso dejar en claro que al unirse determinadas organizaciones, con ganas de construir algo mas grande, no les queda sino formular un Programa de Principios que se ocupe de exponer, a la luz del día, la ideología revolucionaria y no:

…reivindicaciones políticas que no se salen de la vieja y consabida letanía democrática: sufragio universal, legislación directa, derecho popular, milicia del pueblo, etc.

…que todas estas lindas menudencias tienen por base el reconocimiento de la llamada soberanía del pueblo, y que, por tanto, sólo caben en una república democrática.” Karl Marx. 1875.

El Programa de Gotha fue la base escrita que sirvió para la unificación de la Unión General Obrera y el Partido Obrero Social-Demócrata de Alemania, en una organización mayor: Partido Socialista Obrero de Alemania. Por ende, solo un Programa de Principios pudo servir eficazmente a tal propósito, y así lo entendió Marx al tomarse la molestia de criticar severamente el susodicho documento que iba a ser tratado en el Congreso de Gotha.

…pero ni Marx ni ningún otro dirigente teórico o practico de la Social-Democracia han negado la enorme importancia que tiene un programa…” Lenin. 1899.

Lenin conocía a profundidad el socialismo científico y por eso brinda tal aseveración tocante del programa basado en lo que fue el Programa de Erfurt (Proyecto de Programa Social-Demócrata de 1891). En ese documento se pretendía ahondar en las reivindicaciones políticas y económicas con mayor profundidad y, por tal razón significaba un paso adelante en relación al Programa de Gotha.

En esos momentos en que Lenin definía el asunto relacionado al Programa, era lógico que lo hiciera en el espíritu del Programa de Erfurt de 1891, pues el auge revolucionario empezaba a notarse en Rusia, dirigido por Plejanov desde el extranjero. En aquellos tiempos se desarrollaban cada día mas los círculos de estudios marxistas… por tanto se entiende que en tales circunstancias plantear la elaboración de un Programa de Principios era resueltamente estúpido. Se requería de un Programa de análisis de la realidad y de señalamiento de tareas.

Una consideración al respecto.

El Programa de Gotha que analizara Marx (Critica del Programa de Gotha) es distinto al analizado por Engels (Programa de Erfurt), del cual Lenin extrajo su definición de Programa. Ello no convierte al líder bolchevique en un tergiversador de Marx sino en uno de los más grandes desarrolladores del ideario de aquél.

Como queda señalado en líneas arriba, un Programa de Principios responde a la necesidad de un documento en el cual la heterogeneidad de interpretación de cada uno logre coincidir con el de los demás. Siendo así la cosa, el movimiento político Unidad Ciudadana requiere de un Programa de Principios para la organización interna y de un Programa de análisis de la realidad y tareas para su desenvolvimiento exterior… Disculpen el enclenque propósito de dar una opinión personal.

Charlie John

Martes, 11 de junio de 2002

******************

Aunque lo expuesto tenga un tufillo marxistoide, la idea principal que se pretende dar a conocer es, a mi modesto entender, correcto; no así la parte final de pretender en una misma etapa propugnar dos programas, uno de principios y otra de análisis y tareas, pues eso genera inestabilidad organizativa. Todo a su debido tiempo.

Considero totalmente miserable que se haya discutido hoy acerca de qué Perú deseamos y no haber pensado siquiera en tener una clara concepción del mundo (¿Qué mundo proponemos?), como si los problemas que aquejan al Perú se hallan divorciados de los problemas del mundo. Empecemos a discutir la posibilidad de un Programa de Principios, pues quizá, no sean tantas las diferencias sino las coincidencias que entre nosotros tenemos, y esto no con el ánimo de homogeneizar nuestras ideas sino de aunar esfuerzos por la construcción de algo mayor: una organización política de nuevo tipo, diferente de raíz a los partiduchos que abundan en nuestro suelo patrio.

Hoy, en medio de la fiesta internacional de los trabajadores por el 1º de Mayo, comencemos por dar los primeros pasos en la consecución de un camino de esperanza y de fuerte convicción en el cambio.

Charliejohn

01 de Mayo de 2011